El féretro conteniendo el cuerpo de la desafortunada congresista fue sepultado en el cementerio “El buen pastor” de Bagua, ciudad hasta donde viajaron el ministro del Interior, Luis Alva Castro, y los legisladores Aurelio Pastor, Martha Moyano y Álvaro Gutiérrez Cueva.

El cortejo fúnebre partió desde la Iglesia Matriz donde se había realizado una misa de cuerpo presente en presencia de centenares de ciudadanos que presenciaron el oficio religioso.

Tras la misa, el ataúd de Salazar, cubierto con el Pabellón Nacional, fue llevado hasta el colegio “La Inmaculada”, donde la legisladora cursó estudios secundarios.

En ese centro educativo, Salazar recibió una sentida despedida del alumnado, profesores y padres de familia.

Posteriormente, fue trasladado al local del Comité Ejecutivo Provincial del Apra, y a su casa, ubicado en la calle Héroes del Cenepa, que lucía un crespón negro en señal de duelo.

La Municipalidad Provincial de Bagua se sumó a los homenajes declarándola “Hija predilecta” de la ciudad en reconocimiento a la labor realizada a favor de su tierra.

La población de Bagua también se mostró conmovida por la inesperada desaparición física de Fabiola Salazar y al paso del cortejo fúnebre demostró su cariño por su representante coreando su nombre.