(La PRIMERA).- Los comuneros de las etnias Awajun-Wampis de la fronteriza cuenca de los ríos Cenepa, Sawientsa y Comaina, se han declarado en alerta máxima, como un antecedente a una virtual declaratoria de guerra, anunció el congresista José Maslucán, ante la desidia del gobierno respecto a su petición de diálogo para concordar puntos de vista sobre las operaciones de la minera “Afrodita”, una subsidiaria de la transnacional canadiense Dorato en la Cordillera del Cóndor.

En enero último, los comuneros de la localidad de Huampami, provincia Condorcanqui, región Amazonas, tomaron en rehenes a varios trabajadores de la empresa “Afrodita” reclamando el inmediato retiro de la mina de sus predios ancestrales, por la contaminación provocada en sus ríos con mercurio y cianuro, en defensa “de continuar viviendo en un ambiente sano y puro, sin la contaminación de ningún tipo de elementos químicos”, mencionaron en un acta del 14 de diciembre del año pasado.

El congresista nacionalista Maslucán, quien la semana pasada estuvo reunido con ellos en la localidad de Huampami, dijo que los comuneros están bastante indignados porque el viceministro de Energía, Felipe Isasi, llegó hasta allí, pero no quiso reunirse con ellos para resolver el problema originado por la irregular presencia de la empresa minera “Afrodita”.

Informó que los líderes awajún-huampis, liderados por el apu Zebelio Kayap, le hicieron conocer que mantenían la exigencia al Ministerio de Energía y Minas para “que revoque todos los derechos y concesiones mineras otorgadas en el distrito de El Cenepa, por no haber respetado el derecho de consulta previa”, como lo establece el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo y la declaración de Derechos de los Pueblos Indígenas de la ONU.