Informe.21: “NUNCA ANTES TUVIMOS UN OPERATIVO TAN MAL PLANEADO” (Perú 21).- Los sobrevivientes del ‘Baguazo’ revelan detalles de la operación policial en la Curva del Diablo. Ponen en duda eficiencia de plan, y revelan clamorosa falta de equipamiento policial. Insisten en que comando policial no contó con información previa de Inteligencia. En el Hospital de la Policía, los sobrevivientes del “Baguazo’ ocurrido el viernes pasado se sobreponen al dolor que les producen las heridas encajadas para expresarle a Perú.21 que la operación policial que planificó su comando para desbloquear la carretera Fernando Belaunde fue un fracaso. Pidiendo expresamente la reserva de sus nombres por temor a represalias, los agentes han puesto en cuestión la estrategia aplicada por su comando superior para solucionar el conflicto de Bagua. “Si hubiera sido un operativo bien planificado, sencillamente se habría llevado paramédicos, dos helicópteros, como mínimo, y más efectivos. ¿Con menos de 300 policías, íbamos a desbloquear 10 kilómetros de carretera? En agosto del año 2008, cuando ocurrió lo de Corral Quemado, eran dos mil indígenas que protestaban y nosotros éramos 1,300. ¿Por qué esta vez no se hizo lo mismo”, cuestionó uno de ellos. En la cama que ocupa en el nosocomio, otro policía, que estuvo en la Curva del Diablo, se inclina un poco buscando ser mejor oído y dice: “Nosotros sentíamos que estábamos preparados para desalojo y control de multitudes, llevábamos casco, escudo, chaleco antimotín, vara de goma, el AKM reglamentario y gas. Pero no estábamos preparados para esta operación, que era especial”. “Para esta operación especial debimos haber tenido el equipo necesario, o sea, casco tipo Keblack, chaleco antibalas, fusil AKM con ocho cacerinas (tenían cuatro), fusil con ocho cacerinas”, agregó el efectivo. Su compañero de la cama de al lado –otro sobreviviente de la Curva del Diablo– acota: “Nos dijeron que era un desalojo, pero era un desbloqueo, un operativo especial, y para hacer un desbloqueo se requiere de un plan, una orden de operaciones, un plan de seguridad, con Inteligencia previa”. Todos coinciden en que lo ocurrido obedece a la falta de Inteligencia policial. “COMO NUNCA ANTES”. Un veterano de la Dinoes (Dirección de Operaciones Especiales) cuenta su experiencia. Estuvo en el operativo del mercado Santa Anita, en la huelga de los cocaleros del Alto Huallaga, y ha estado destacado por 50 días en el Valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE). Y, de todos, el de Bagua es el operativo peor planificado que ha visto. “Es malo, nunca antes hemos tenido un operativo tan mal planeado”, confiesa. Un agente joven, que no es de la Dinoes, sino un efectivo antidrogas que fue enviado para apoyar a los secuestrados de la estación 6 de Petroperú – pero que los halló muertos –, opinó que “no hubo un manejo de la Inteligencia, ni siquiera hubo un planeamiento; no hubo un plan de operaciones, nos han mandado así nomás; ha sido una orden de momento”. Acostumbrado a operar con previa información de Inteligencia, señala que, a él y a sus colegas antidrogas, sus jefes suelen decirles: “Inteligencia nos ha dicho tal cosa, hay que hacer esto”. A lo mejor, expresa, “aquí hicieron un documento, un plan, pero no lo cumplieron”. ÓRDENES Y CONTRAÓRDENES. Los sobrevivientes que estuvieron en el operativo de la Curva del Diablo coinciden en relatar que el jueves 4 de junio, en la noche, en las afueras de la comisaría de Corral Quemado, 60 efectivos en formación fueron informados de que debían tomar ese punto de la carretera. “Los que llevaban ahí más de un mes destacados le dijeron al comandante Carpio que los nativos tenían bombas molotov y que la zona estaba minada. Pero ni él ni el general Muguruza hicieron caso y dijeron que la operación se hacía de todas maneras. Si nos oponíamos, igual íbamos, y si insistíamos, nos acusaban de amotinamiento. Teníamos temor, no conocemos la zona”, sostuvo un policía. También refieren que el coronel Humberto Lúcar Espinoza – jefe de Regimiento de la Dinoes – había diseñado y organizado un operativo con soporte aéreo, “pero vino el general Muguruza de Lima y cambió todo. Dijo que el operativo se hacía al día siguiente sí o sí. Lúcar quería hacer un operativo exitoso; Muguruza hizo que fuera un fracaso. Pero, claro, él recibe órdenes de acá, de Lima”. La ministra del Interior, Mercedes Cabanillas, ha manifestado que son los altos mandos – y no ella – los que elaboran los planes operativos, aunque el aparente apresuramiento de la operación habría tenido su origen en una decisión política de desbloquear la carretera Fernando Belaunde a como diera lugar. |